La lubina a la plancha es uno de los platos más deliciosos y saludables que puedes preparar en casa. Con su textura tierna y su sabor suave, la lubina es un pescado muy versátil que se presta perfectamente a ser cocinado a la plancha. En este artículo, te enseñaremos cómo lograr que tu lubina a la plancha quede perfectamente crujiente por fuera, manteniendo su jugosidad por dentro. Y lo mejor de todo es que ¡comenzaremos por la piel!
Los Secretos de la Lubina a la Plancha
Selección del Pescado
Antes de comenzar a cocinar, es crucial seleccionar una lubina fresca y de calidad. Fíjate en que los ojos estén brillantes, las escamas relucientes y el olor sea fresco a mar. Estos son indicadores de que estás comprando un pescado en óptimas condiciones.
Preparación de la Lubina
Lava cuidadosamente la lubina por dentro y por fuera. Asegúrate de haber eliminado todas las escamas y de haber limpiado el interior para que esté listo para cocinar. Seca muy bien el pescado con papel de cocina para que la piel pueda dorarse de manera óptima al cocinarlo.
Pelando la Piel
Para lograr una lubina a la plancha perfectamente crujiente, es fundamental empezar por la piel. Con la ayuda de un cuchillo afilado, realiza cortes superficiales en la piel en forma de rombos. Esto permitirá que el calor penetre de manera uniforme y la piel se dore de manera consistente.
La Cocción Perfecta
A la hora de cocinar la lubina, es esencial precalentar muy bien la plancha. Coloca un chorrito de aceite de oliva sobre la superficie caliente y luego coloca el pescado con la piel hacia abajo. Deja que se cocine sin mover durante unos minutos para que la piel se dore y se forme una capa crujiente.
Vuelta y Terminación
Una vez que la piel esté dorada y crujiente, con cuidado da la vuelta a la lubina utilizando una espátula ancha. Cocina por el lado contrario durante unos pocos minutos hasta que el pescado esté en su punto justo de cocción. Recuerda no sobrecocinarlo para que mantenga su jugosidad.
La Salsa Perfecta
Acompañar la lubina a la plancha con una salsa deliciosa puede llevar tu plato al siguiente nivel. Una salsa de limón y mantequilla, o una vinagreta de hierbas frescas, son excelentes opciones para resaltar el sabor suave de la lubina sin opacarlo.
Emplatado y Decoración
Una vez lista tu lubina a la plancha, emplátala con cuidado sobre un lecho de verduras al vapor o un poco de arroz blanco. Decora con unas rodajas de limón, unas hojitas de perejil o incluso un toque de pimienta para darle un aspecto visualmente atractivo que invite a ser degustado.
Disfrutando en Familia
No hay nada como saborear un plato exquisito en compañía de tus seres queridos. Comparte tu lubina a la plancha recién hecha con tus familiares o amigos y disfruten juntos de una comida memorable llena de buenos momentos y deliciosos sabores.